Laviana (en asturiano Llaviana) es un concejo español de la comunidad autónoma del Principado de Asturias. Limita al norte con Bimenes y Nava, al sur con Aller, al este con Piloña y Sobrescobio y al oeste con San Martín del Rey Aurelio y Mieres. Cuenta con una población de 12 754 habitantes (INE 2021).
Siglo XIX en adelante.
En el siglo XIX, hay nuevas transformaciones para Laviana, con el triunfo de las ideas liberales que traerían la disolución de todas las jurisdicciones señoriales y su incorporación a los respectivos concejos. Así, los cotos de Tiraña y Villoria se incorporan a la jurisdicción del Ayuntamiento de Laviana, que adquiere la unidad administrativa que conserva hoy en día. Hay otro cambio sustancial, el ferrocarril de Langreo se extiende hasta la terminal de Pola, que impulsó en Laviana el desarrollo minero e industrial. Se funda la empresa Coto Musel, que propició una gran cantidad de cambios en la estructura de Laviana. Todas estas nuevas actividades produjeron notables cambios en las condiciones de vida y en las ideas, ya que hasta mediados de este siglo el concejo era eminentemente agrario. Esto lo demuestra la crisis de subsistencia de 1834.
En el siglo XX ya experimentó una gran actividad minera. Tuvo una especial incidencia la huelga de 1917, suprimida con una dura represión que no lograría debilitar las ideas del movimiento obrero. En 1934, parte de su población participa en los sucesos revolucionarios de octubre, que culminarían con la toma de la capital provincial. En la Guerra Civil, Laviana queda encuadrada en la zona republicana y será el último reducto del Frente Norte en España. Una vez concluida la guerra, las partidas guerrilleras, entre las que destaca la de Lisardo, siguieron combatiendo. La zona fue una de las más reprimidas, dejando sus más tristes episodios. Con la política económica franquista la actividad minera tuvo una sensible reanimación y un gran crecimiento demográfico. A partir de la década de los setenta hay una profunda crisis del sector minero, lo cual trajo la creación como un intento de reestructuración de HUNOSA, que con el tiempo reunió la mayor parte de las explotaciones mineras. La única actividad minera quedó reducida al pozo Carrio y muchas personas se desplazaron a las minas de la zona baja de la cuenca.